Tal día como hoy, el 19 de agosto de 1917, el ejército sofocaba la huelga general que aquel mismo año paralizó a toda España. Huelga que pasaría a la historia como la huelga general revolucionaria de 1917.

Fue convocada por la UGT (Unión General de Trabajadores) y el PSOE con motivo del creciente deterioro de las condiciones de vida de las clases trabajadoras como consecuencia del impacto económico que estaba teniendo en España la Primera Guerra Mundial pese a ser neutral. Inflación, deterioro de los salarios, aumento del desempleo, desabastecimiento…Además, esta huelga general recibió en algunos lugares de España el apoyo de la CNT (Confederación Nacional del Trabajo).

En diciembre de 1916 ya se había producido con éxito otra huelga pero la nula respuesta del Gobierno de España hizo que las organizaciones obreras acordaran promover una huelga indefinida en un manifiesto conjunto que hicieron público el 27 de marzo de 1917.

La respuesta del Gobierno del liberal conde de Romanones fue suspender las garantías constitucionales y encarcelar a los firmantes del manifiesto durante una semana.

Esta nueva huelga general, esta vez indefinida, tuvo un carácter revolucionario ya que su objetivo no solo era que el Gobierno tomara medidas para paliar la crisis de subsistencias y la crisis del trabajo sino que, en palabras del socialista Largo Caballero, buscaba una transformación completa de la estructura política y económica del país.

Los planes de la huelga se vieron alterados cuando, el 19 de julio de 1917, los ferroviarios de Valencia afiliados a la UGT comenzaron una huelga a causa de la no readmisión de 36 obreros que habían sido despedidos por la Compañía de los Caminos de Hierro del Norte de España. Esta negativa de admitir a los 36 trabajadores despedidos contó con el apoyo decidido del Gobierno.

Negativa que tuvo como consecuencia el inicio de una huelga general que paralizó a todo el país durante nueve largos días. Una huelga de carácter revolucionario que se saldó con 71 muertos, de los cuales cuatro fueron guardias civiles, 156 heridos y unos 2.000 detenidos.