Tal día como hoy, el 20 de septiembre de 1867, la fragata Numancia conseguía la hazaña de convertirse en el primer buque blindado en dar la vuelta al mundo.

La fragata Numancia fue una nave blindada de la Armada española. Su construcción fue llevada a cabo en el año 1864 por la compañía francesa Forges et Chantiers de la Mediterranée en los astilleros de La Seyne con la intención de volver a situar a España entre las principales potencias navales.

Su nombre se debe a la gesta que siglos antes habían logrado los habitantes celtíberos de la ciudad de Numancia frente a las tropas romanas dirigidas por el cónsul Escipión Emiliano.

La fragata Numancia participó en la gran mayoría de los hechos navales más importantes de la historia de España durante el último tercio del S.XIX desde que se hizo a la mar el 8 de enero de 1865.

Fue inmediatamente destinada a la escuadra del Pacífico. El 13 de marzo de 1865 arribó en Montevideo, ciudad de la que partió varias semanas después rumbo al estrecho de Magallanes para posteriormente desembarcar en Valparaiso (Chile). Desde allí, la nave zarparía para participar en la Guerra hispano-sudamericana y entrar en combate en la batalla de El Callao.

Tras sufrir graves averías en la batalla, la fragata se dirigió a Filipinas junto a otras 4 naves. No obstante, numerosos casos de escorbuto hicieron que la fragata Numancia llegase en solitario al puerto de Manila el 8 de septiembre de 1866.

El 19 de enero de 1867 la embarcación salió nuevamente al mar, esta vez rumbo a Río de Janeiro aunque esta nunca llegó a su destino. El motivo: la decisión de la tripulación de volver a la Península Ibérica durante el trayecto.

De esta forma, la fragata Numancia volvía a arribar en las costas de la Península Ibérica. Lo hacía 2 años, 7 meses y 6 días después del inicio del viaje completando la primera circunnavegación de un buque blindado al atracar en Cádiz el 20 de septiembre de 1867.