Tal día como hoy, el 4 de febrero de 1893, fallecía en la ciudad de Vigo la escritora y activista social Concepción Arenal, una pionera del feminismo, una mujer adelantada a su tiempo que logró sortear las dificultades de una época que impedía a las mujeres ir a la universidad. Lo hizo al disfrazarse de hombre, una triquiñuela que le permitió estudiar derecho, sociología, historia, filosofía e idiomas.
Su primer libro fue la novela titulada ‘Historia de un corazón’, y, en 1851, publicó ‘Fábulas en verso’. Pronto fueron conocidas sus críticas a la injusticia social de su tiempo, especialmente contra la marginación de la mujer, la condición obrera y el sistema penitenciario.
En el año 1862, Concepción Arenal publicó ‘Manual del visitador del preso’, una obra que fue traducida a casi todos los idiomas europeos y que le permitió ser nombrada dos años más tarde visitadora general de prisiones de mujeres. Desde este cargo Concepción Arenal luchó por mejorar las condiciones de vida de los presos, reformar las instituciones penitenciarias y orientar el sistema penal hacia la reeducación de los delincuentes.
Concepción Arenal desarrolló una intensa actividad filantrópica. Fue fundadora del Patronato de los Diez, de la Constructora Benéfica y del periódico ‘La Voz de la Caridad’. También fue secretaria de la Cruz Roja de Madrid y directora de un hospital de campaña durante la Tercera Guerra Carlista.
Ello no le impidió elaborar una amplia obra escrita en la que combatió los prejuicios sobre la supuesta inferioridad fisiológica, moral e intelectual de la mujer y exploró las consecuencias de su acceso a la educación y al trabajo con obras como ‘La mujer de su casa‘ y ’La mujer del porvenir’. También reflexionó sobre otros temas como la legitimidad de la guerra justa en defensa de los derechos humanos o la intervención del Estado en favor de los desvalidos.
Concepción Arenal falleció en la ciudad de Vigo tal día como hoy de 1893. Su muerte tuvo lugar a los 73 años de edad.